Es importante explorar las consecuencias colaterales de una condena

Una consecuencia colateral del castigo penal se refiere a un efecto que se extiende más allá de la sentencia impuesta por una condena, el régimen probatorio, o las condiciones de libertad condicional.

Un ejemplo clarísimo de esto son las consecuencias adversas migratorias a un caso criminal y a una condena. En este portal se toca este tema en la sección de consecuencias migratorias. Pero hay muchas otras consecuencias colaterales.

Dichas consecuencias pueden no ser necesariamente oficiales o jurídicas. También pueden ser repercusiones sociales o económicas derivadas del castigo penal. Una condena por un delito, y sobre todo por un delito grave, puede tener una gran cantidad de condiciones adversas, incluyendo la perdida de un empleo; la dificultad en conseguir otro empleo o un buen trabajo; la revocación de una licencia profesional; la perdida de acceso a diversos programas de beneficio del gobierno; las restricciones al derecho constitucional a portar armas y a votar, etc.

Por esto siempre es importante hacer una revisión completa y comprehensiva del caso, y de la persona, e incorporar en la estrategia no solo una defensa legal, sino un plan de vida a corto y largo plazo. Parte de esto se puede lograr a través de la defensa holística, que se practica en muchas de las oficinas del defensor público, como es evidente al hacer una revisión de estas oficinas en la sección de los contactos de este portal. Además, es importante trabajar para restaurar los derechos en todas las instancias posibles, así como limpiar el récord de una persona lo mejor posible.